miércoles, 18 de noviembre de 2009

Gélida Ilusión

Una explosión sacudió el Rebel Blood. Los vampiros que se encontraban en el lugar salieron corriendo asustados, no era para menos ya que el fuego es nuestro mayor enemigo (incluso de los renacidos como yo). Pero lo curioso era que no salía humo del local, solo se había escuchado el
ruido de una explosión mas no había rastro de fuego o humo. Solo el techo del Rebel Blood había sufrido daños.

Karl había usado una técnica especial, una especie de Protean Elemental.

Explicare eso de Protean Elemental, tantas palabras nuevas posiblemente los confundan. Verán, existen cuatro elementos básicos: Aire, Agua, Tierra y Fuego. El Protean Elemental es aquella habilidad que permite a un vampiro usar las propiedades de dichos elementos básicos.
El Protean simple es la habilidad que tienen los Gangrel para convertirse en perros, lobos, ratas y murciélagos (y pensar que Shogo no creía nada de eso)

La habilidad que Karl había usado era una mezcla de aire frió y agua. La mezcla de dichos elementos genera lo que conocemos como hielo.

Por suerte Shogo Stephanie y yo habíamos podido esquivar su feroz y sorpresivo ataque. Vladimir veía fijamente a Karl. Sus ojos grises ya no reflejaban tranquilidad e inocencia que siempre mostraban, ahora mostraban un poco de miedo.

-Vaya que son rápidos, esquivaron mi “puño de hielo”-Dijo Karl mirándonos, aun estaba en una posición como si hubiera dado un puñete a alguien.
-¿Puño de hielo?-Estaba asombrado.
-Si, y la verdad me sorprende que lo hayan esquivado. Los Brujah que estaba aquí no eran tan rápidos como ustedes.

Estábamos en problemas. Si bien es cierto que éramos tres contra uno, Karl estaba en un nivel muy superior al de nosotros. Además Shogo y yo sabíamos usar un Protean Elemental de Aire. No sabía si Stephanie sabia usar algún Protean Elemental o no pero si no pensaba en algo pronto
terminaríamos congelados.

-¡Detente Karl, ellos ya no son nuestros enemigos!- Le grito Vladimir a Karl
-No te metas Vladimir, nuestro amo nos dijo que estos tres sujetos estaban a nuestro nivel- Karl le contesto a Vladimir sin mirarlo, su mirada seguía clavada en nosotros.
-¡No! ¿Acaso no recuerdas? Nuestro “amo” nos abandono cuando mas lo necesitábamos. Ya no tenemos nada que ver con ellos ni con el sujeto que llamábamos amo.
-¿Y que si ya no es nuestro amo? Quiero saber si lo que decía era cierto. Quiero ver la verdadera habilidad de Vaynard, Stephanie y Shogo; los tres renacidos.

Sabia de nosotros, pero ¿Cómo? Los únicos que sabían la clase de vampiros que éramos eran Beckett, Versatis y Kravo. No había forma que ellos supieran la clase de vampiros que éramos. Incluso Fernando, el amigo de Stephanie, no sabía exactamente que era un renacido. Kravo
nunca le dio a Fernando una explicación clara al respecto (además el miedo que producía Kravo pues le hizo olvidar a Fernando el tema de los renacidos).

-¿Como sabes…lo de renacidos?- Le pregunte aun asombrado.
-Ustedes son vampiros raros, nuestro ex –amo quería saber un poco más de ustedes, según El ustedes tienen algo especial…- Karl bajo la mirada. -…algo especial.
-¿Algo especial?-Pregunto Shogo

En ese momento la temperatura en el salón disminuyo rápidamente. Se podía ver que el puño de Karl se tornaba de color celeste. Estaba preparando otro ataque y esta vez se aseguraría que no falle.

No teníamos tiempo para seguir discutiendo, teníamos que actuar y pronto.

-Esta vez acabare con ustedes…-Karl ajusto su puño congelado-¡Y Vladimir y yo seremos los únicos renacidos en todo Henoc!

Karl lanzo su ataque dirigido a mí. Lo que acababa de decir Karl podía ser analizado luego, tenia que esquivar el ataque y eso hice.

El puño de hielo de Karl siguió su camino y se encontró con Stephanie. Por suerte Shogo uso el Protean Elemental de aire, el que habíamos aprendido gracias a Beckett, para evitar que el golpe le cayera a Stephanie de lleno. Pero su pequeño escudo de aire no amortiguo todo el
ataque. Shogo y Stephanie salieron volando, pero ninguno con heridas de consideración.

-Gracias- Le dijo Stephanie a Shogo
-Te dije, si algo te pasa yo…
-¿Tu que?- Le pregunto Stephanie a Shogo tomándole la mano

No tenían tiempo para cosas románticas, Karl había lanzado otro puño de hielo. Tenían que esquivarlo rápido a menos que quisieran convertirse en estatuas de hielo.

-¿No que ya no éramos enemigos?-Le grito Shogo a Karl que trataba desesperadamente de acabar con nosotros.
-¡Tu nunca entenderás!-Le respondió Karl siguiendo con sus ataques.- ¡No sabes lo que es que esforzarse al máximo para que unos desconocidos te quiten lo que más amas!

Los ataques de Karl se intensificaban cada vez más y más. Vladimir no podía hacer nada más que generar un escudo que lo protegía de los ataques de Karl.

-¿Pero que te hemos quitado?- Le pregunte a Karl.
-…Y no solo ustedes… ¡Los asquerosos humanos también me quitaron lo que más amaba!

No me importo en ese momento lo que había dicho Karl, solo atine a sacar mi Glaicus y enfrentarme a el.

-Por fin, esos son los ojos que quería ver Vaynard- Karl sonrió mostrando sus colmillos

Mis ojos estaban rojos, decidido a atacar. Corrí hacia el, tenia que detenerlo.

-¡Una acción muy estúpida Vaynard!- Karl lanzo su puño de hielo contra mi.
-¡Vaynard esquívalo!- Shogo me grito

Demasiado tarde. El golpe cayó directo en mí. Caí inerte al suelo. Al parecer Karl había ganado.

Karl al verme en el suelo dejo de atacar a Shogo y a Stephanie. Se acerco hacia mí.

-No eres la gran cosa Vaynard, no lo eres- Dijo Karl mirándome con desden. –Ahora acabare contigo.

-“Aun no cantes victoria”.

Karl se quedo helado, no era posible mi voz estaba detrás de el pero mi cuerpo estaba inerte en el piso.

Y efectivamente yo no estaba vencido, estaba detrás de el. Mi Glaicus estaba apuntando directamente al corazón de Karl.

Cuando Karl voltio fue demasiado tarde para el. La estocada que le lancé penetro su pecho y atravesó su corazón, y por si fuera poco mi ataque estaba cargado con el Protean Elemental de viento.

La presión de mi ataque saco a Karl disparado estampándolo contra la pared. Como ya saben clavarnos algo en el corazón no nos mata pero si nos paraliza.

Karl comenzó a botar sangre por la boca.

-Co...Como...no es posible, yo te lancé mi ataque.
-Si, por lo menos así lo viste
-¿Q...Que?- Karl estaba extrañado
-Auspex Visionario…te cree una ilusión y no solo a ti, sino a todos en esta sala. Lo que congelaste era una ilusión.

Stephanie, Shogo y Vladimir estaban boquiabiertos.

-Me costo mucho aprenderlo, pero al fin dio resultado.
-No...Esto no a terminado…yo…yo…- Karl trato de ponerse de pie, pero no podía. El efecto de la estocada con el protean elemental lo había debilitado demasiado.
-Ahora quisiera saber que te quitaron los humanos.

Vladimir se nos acerco.

-Lo siento mucho, no pensé que Karl los atacaría de esa forma.
-Descuida, esto ya acabo- Le respondí.
-Como disculpa a lo ocurrido les contare como Karl y yo nos convertimos en vampiros y del porque…porque Karl odia a los humanos.



Vaynard

1 comentario:

Unknown dijo...

ME TIENES CAUTIVADA MASIVAMENTE CON ESTA HISTORIA.... GRACIAS POR DARNOS A TUS SEGUIDORES UNA MAS Y EN ESPERA DE MUCHISIMAS MAS... BESOS¡¡¡