martes, 30 de marzo de 2010

La decisión de María

Los vampiros no sueñan, es algo que me dijo Versatis, el Nosferatu que me enseño a usar el Auspex.

-“Como los vampiros somos seres muertos no podemos soñar, o al menos yo pienso eso”-Fueron sus frases.

Yo pienso que se equivoca, quizá el no soñara cuando duerme, pero yo si sueño. Y quizá otros vampiros lo hagan también.

Algo que no soporto como vampiro que soy y como humano que era es que me despierten cuando estoy durmiendo. Es lo más incomodo que alguien puede hacer.
Pues ese día María lo hizo, pero lo hizo de una forma tan sutil y delicada que no me desperté tan irritado.

-Buenos días Vaynard ¿Cómo dormiste?
-Eh…buenos días María, pues…
-Asumo que bien ¿No?
-Si.
-Me alegro ¿Me acompañas en el desayuno?
-¿Desayuno?-Estaba medio extrañado.
-Si, de…sa…yu…no, ven-Me dijo estirando su mano hacia mi.
-OK, te acompaño.-Tome su mano y la acompañe a tomar desayuno.

Estábamos en la mesa, había panes, jugo de piña, te, jamón, queso, salchichas y mantequilla. Era un desayuno agradable.

-Vaya ¿Planeas comerte todo eso?-Le pregunte
-No, solo un poco. ¿Te puedo hacer una pregunta?
-Si, claro
-¿En este momento puedes usar Auspex?
-No puedo, es de día ¿Recuerdas?
-Si…de día te vuelves tan vulnerable como un humano ¿Correcto?
-Si

María se quedo en silencio por unos segundos.

-Prueba un pan
-¿Qué?
-Prueba un pan o toma un poco de jugo.
-María, no puedo, yo soy un…
-¿Podrías intentarlo?

Di un suspiro y agarre un vaso que contenía jugo de piña. Mire a María y me tome el jugo. Sentí el sabor de la piña en mi boca y de ahí como el jugo bajaba por mi garganta. No devolví el jugo ni nada por estilo, simplemente no paso nada.

-Pero… ¿Por qué?
-Al parecer tú vuelves a ser humano en el día.
-¿Qué?
-Si, o sea no solo tus poderes se neutralizan en el día, sino también que vuelves a ser humano.
-¿Qué? ¿Humano? Te equivocas
-Puede que me equivoque, pero tú lo sueles decir ¿No?
-¿Decir que?
-“De día soy tan vulnerable como un humano”

María me sorprendió, si lo que decía era cierto significa que soy más extraño de lo que yo pensaba.
De día humano, de noche vampiro ¿Qué locura era esa? ¿Acaso era alguna historia de anime japonés o que? Si alguien es vampiro se queda como vampiro y punto. Pero si esa afirmación era cierta ¿Por qué me vuelvo vulnerable de día, como los humanos? Es más ¿Por qué puedo alimentarme en el día de comida normal? ¿Acaso un vampiro no consume más que sangre?

-¿Te pasa algo? ¿Te quedaste callado?
-¿Ah? No nada…
-Y cuéntame ¿Cómo te fue ayer?
-Ayer…pues…
-Déjame adivinar, de seguro saliste con Shogo y Stephanie…
-Pues si pero…
-…y Shogo no pudo controlarse y comenzó a coquetear con cualquier chica que pasaba por ahí.
-Eh…no exactamente.
-¿No? ¿Significa que alguna chica no cayo en los “encantos vampiricos” de Shogo?
-Pues si lo quieres ver así…
-Me pregunto quien será esa chica…debe ser alguien fuera de lo común.
-Si que lo es
-¿La conoces?
-Se llama Milagros Grace y es una…comerciante de bienes raíces.
-¿Bienes raíces? Pues debe ser muy bonita y muy inteligente.

María había acertado, si que era bonita e inteligente, y no solo eso, también era muy ágil, de otro modo no seria una cazavampiros.

-María tengo que hablar contigo.
-OK, te escucho.
-Esta chica, Milagros Grace, no es tan solo una comerciante de bienes raices, ella es una cazavampiros.

Hubo un silencio en toda la casa, luego María empezó a reír.

-Oye, no es broma.
-Pero claro que lo es ¿Cazavampiros? No bromees. Nadie puede matar a un vampiro.
-Pues ella casi lo hace conmigo y con Shogo y también con la mascota de Degónius.
-¿Degónius?
-Es un vampiro Tremere, es un demente que creo un monstruo llamado Sully, que es un Blautsauger.
-¿Un que?
-Un…mejor te cuento todo desde el principio.

Y así lo hice, le conté todo lo que había pasado: Desde el juego de póker en el Taita hasta mi enfrentamiento con Milagros.

-…y de ahí me dio esta tarjeta.-Le dije mostrándole la tarjeta personal de Milagros.
-¿Fuiste al Taita a buscar chicas? ¿Y estando conmigo?-María se enojó.
-No, fui la Taita por que necesitaba dinero.
-Y lo primero que se te ocurrió fue ver a la chica bonita y coquetear con ella ¿No?
-Eso no es verdad, además, esa chica quiere matarme.
-No lo creo
-¿Por qué?
-Aun sigues con vida.
-No me mato por que salio el sol y según ella, por cuestión de honor no me mataría.
-Creo que tú le gustas.
-¿Tu crees?-Le pregunte en broma, pero ella no lo tomo muy bien.
-¿Cómo que si creo? ¡Por que eres tan…!
-Era broma, tranquila. Además no pienso fijarme en alguien que quiere matarme.

María se tranquilizo, sea como sea lo que dije tenia mucho sentido, yo no me podría fijar en alguien que me quiere matar y cuyo único objetivo en la vida es acabar con todos los vampiros, y muy aparte de todo eso, yo soy muy fiel. Así que no puedo estar con una chica y con otra a la vez, eso me traería cargo de conciencia (es algo que aun tengo siendo vampiro).

-Bien Vaynard, yo también conocí a alguien.
-¿Ah?
-Si, pero descuida, es una chica, se llama Bianca.
-¿Bianca?
-Si, Bianca. Ella es una…una… ¿Cómo le dicen ustedes?
-No se a que te refieres con “ustedes”
-¡Ah! Es una Ghoul.
-¿Una que?
-Una Ghoul. ¿Nunca has escuchado ese término?
-Pues no.
-Un Ghoul es un ser humano que ha bebido de la sangre de un vampiro, adquiriendo habilidades físicas similares a los de un vampiro.
-¿Existe tal cosa?
-Pues Bianca existe, así que si.
-¿Y como la conociste?
-Pues da la casualidad que ella me estaba buscando a mi.
-¿Ella a ti?
-Si, ella a mi. Y lo curioso es que al parecer eres conocido para algunos vampiros.
-¿Yo?-Estaba medio aturdido
-Si, tu. El famoso vampiro que aguanta la luz, un vampiro renacido.-Dijo bajando la mirada.

Sentí que algo había cambiado en María. Quería decirme algo, pero no se abrevia.

-¿Estas bien? Siento que…
-¿Sientes?-María levanto su mirada, sus ojos estaban llorosos y enojados- ¿Tu eres capaz de sentir algo?
-¿Qué te sucede?
-Sucede que ya no eres el mismo Vaynard que conocí, del cual me enamore. Ni siquiera podemos salir juntos por que siempre pasa algo peligroso para mí.
-Pero es que es muy peligroso salir conmigo…
-¡Ya lo se! ¡Y por eso quiero que me conviertas en una vampiresa!
-Pero ya te dije que…
-¡Si, lo se! ¡Que no quieres! Pero Bianca me a dado la opción de volverme en una vampiresa.
-¿Qué?
-Si, lo único que yo te pido es que me vuelvas una vampiresa, nada más.
-No lo haré.
-Si no lo haces tu Bianca le pedirá a su maestra que ella me vuelva en una.
-No serias capaz.
-Es tu decisión, si me quieres, si quieres que este a tu lado, entonces tengo que vivir a tu ritmo, al ritmo de un vampiro.
-Eso es chantaje.
-No, eso es aclarar las cosas.
-María, yo no quiero convertir a nadie en vampiro ¿Acaso no entiendes que no me gusta ser lo que soy?
-No te creo.
-Perdí todo al convertirme en vampiro, no quiero que tú sufras por lo mismo.
-¡Lo único que tengo en la vida eres tu! ¡Y tu no quieres que yo sea algo tu eres!-María me grito
-¡Pues igual no lo pienso hacer!-Le devolví el grito.

María se seco las lágrimas que caían por sus mejillas. Me miro fijamente.

-¿Es tu ultima palabra?
-Si.
-Pues esto es el final para nosotros.
-¿Tu realmente deseas eso?
-Tú me obligas a hacer esto.
-Entiende por favor, no es que no te quiera, solo que…
-Solo que seria muy peligroso para mí, y protegerme se volvería un estorbo, ¿Verdad?
-No quiero que a ti también te crean un demonio.
-Si estoy a tu lado no importa lo que los humanos me digan, total siendo una vampiresa seria muy superior a cualquier humano.
-No sabes lo que dices.
-Quizá, pero si se lo que quiero. Y no muchas personas saben lo que quieren.
-No lo haré.
-Pues entonces me voy de aquí.
-Pero esta es tu casa…
-No, ya no quiero nada que me recuerde a que fui humano alguna vez, y eso también te incluye.
-OK. Entonces hasta aquí.
-Si, hasta aquí Vaynard.
-¿Te volverás una vampiresa?
-Si, Bianca me ayudara.
-¡¿Cómo puedes confiar en alguien que…?!
-En alguien que me dará algo que mi novio no me pudo conceder, ser una vampiresa.
-Estas loca.
-¡Ya vete!

Y eso hice, me fui. Regrese pasado dos horas a la casa de María pero ella no estaba. Se había ido. Me sentí muy mal, me sentí solo, triste, de lo peor. Mi único apoyo humano se había ido, la única persona que no me dio la espalda ya no era más parte de mi vida.

Sentí que mi vida (La nueva y extraña vida que tengo), ya no valía nada, así que busque la forma de acabar con todo, ya no quería ser vampiro, tampoco humano, simplemente quería acabar con esta vida.

Metí la mano en mi bolsillo y sentí una pequeña cartulina. La saque de mi bolsillo.

-Quizá ella pueda ayudar.-Dije en voz baja.

Fui hacia el teléfono y marque el número que estaba en esa pequeña cartulina.

-Alo. ¿Aun quieres matarme? Pues te doy la oportunidad esta noche.

Vaynard

2 comentarios:

Keity dijo...

ke emocionnnn... espero con ansias la publicacion del proximo capitulo...

Anónimo dijo...

que historia tan interesante..............espero la continuacion ..........
me hablaron de tu blog y me parecio muy interesante, llamativo tambien,